Para mi punto de vista, es para un plan "b", funciona bien en aguas calmas, pero para otras condiciones de exigencias más duras, según las estadísticas de los compañeros que la usaron, su eficacia se reduce a un 50%,de acuerdo a la topografía del fondo y a la intensidad de las corrientes, y el Paraná tiene todos los condimentos para complicarnos un fondeo llegado el caso. Creo que es menos problemático y más económico usar los tradicionales, o incluso made in casa, desde un amortiguador usado con cuatro hierros curvados, hasta un muerto de cemento, que te van a sacar del paso, siempre respetando las leyes de la física, peso y capacidad de fijación.